Editorial – programa de julio y agosto 2019
Me gusta el cine y la capacidad de asombro que despierta para hacerte entrar en universos mágicos. Me encanta la animación, porque tiene una facilidad especial para generar esos universos. Me atrae en especial el animé porque los explora con total naturalidad.
Soy parte de una generación que creció viendo Dragon Ball, Los Caballeros del Zodiaco, Sailor Moon, Evangelion, Cowboy Bebop y todo aquello que nos llegaba desde Japón “muy a cuenta gotas”. Siempre disfruté de los mundos fantásticos que creaban y de sus personajes, a veces insólitos.
Allá por los 80’s un grupo de directores japoneses se propuso producir animaciones de excelente calidad y así pudimos disfrutar de verdaderas obras maestras como Akira o Perfect Blue, las que sentaron unas bases muy altas para una industria cultural que venía en crecimiento.
Hoy se puede ver animé de manera mucho más simple a través de páginas web especializadas que estrenan producciones japonesas en simultáneo para todo el mundo. El animé ya es parte de nuestra cultura audiovisual global y su producción no deja de crecer en cantidad de películas pero sobre todo en calidad visual y narrativa.
Me gusta mucho el animé y me encanta la idea de verlo en una pantalla de cine, algo poco usual en Argentina. La selección de películas que forman El Zoom de julio y agosto, marcaron un hito en la historia del animé, mientras que otras son una semblanza del panorama actual. Algunos de sus directores se han vuelto leyendas del “género” en tanto otros son las promesas del futuro de la animación japonesa. Así, los y las invito a dejarse llevar por la magia del animé en la gran sala de El Cairo Cine Público.
Rubén Stremiz, realizador y animador 3D.
